La Behobia tiene un color especial

Llevo un buen rato buscando las palabras para dar forma al titulo que encabezará ésta entrada, la verdad que no las encontraba porque cualquier buen adjetivo me parece insuficiente para describir lo que se puede llegar a sentir en ésta carrera. Por fin caigo en la cuenta y emulando a Los Cantores de Híspalis que para ellos lo mas grande era su Sevilla, decido bautizarla asi. Los que conozcais la carrera sabréis de que hablo y los que no... pues solo me queda deciros probadlo porque esto es la gloria.
Desde la salida en Behobia se puede apreciar lo que nos espera en los próximos 20km, algunos se agolpan en la salida para no perder demasiado tiempo mientras cogen su ritmo y a otros les da igual porque lo único que quieren es disfrutar de ésta gran fiesta del corredor. Pasando por las calles céntricas de Irun, que nombre mas apropiado ( I - RUN), empezamos a entrar en calor. Gente agolpada a un lado y otro de la carretera nos jalea como queriendo acompañarnos y prestarnos su aliento, aupa!!! Venga, vamos!!! Llegamos a la primera prueba de fuego, la subida al Gaintxurisketa, el desnivel no es muy grande pero las rampas si que son largas; aun sigo sin entender como pude subir hasta arriba sin apenas disminuir el ritmo. Es como si me empujasen por detrás con cada palmada. Proseguimos nuestro camino y entramos en el famoso tramo de los toboganes: Unas rampas de 100-150 metros de subidas y bajadas que ahora entiendo por qué los llaman rompepiernas. Después pasamos Lezo y llaneando llegamos hasta el puerto de pasaia. Se hace un poco largo tanto llano y tanto desnivel en la carretera con raíles incluidos, mas de una lesión habrá por su culpa. Sin acomodarnos mucho entramos de lleno en Donosti, subimos al alto de Mirakruz que en este ocasión las rampas si que dejan a mas de uno sin aliento y sin fuerza en los cuadriceps pero no importa pues las fanfarrias y la gran animación es la culpable de que nuevamente podamos superar el tramo con orgullo runner. Llegamos a la parte final, el boulebard con su mítico último kilometro y digo mítico porque todo el mundo sabe que no es un kilometro, por lo menos son 1,200 pero que lo rodamos como sin querer despertar de este sueño, como deseando que cada carrera fuese como ésta.
Te lo podrán contar, lo podrás ver en la televisión, pero un consejo, vívelo en primera persona para apreciar todo el color, olor y sabor de la que dicen es la mejor carrera popular.
Hay que reconocer el gran trabajo que hace la organización y el voluntariado que se moviliza para atender a su 16000 participantes. Mi mas sincero agradecimiento a la gente que no cejó en su empeño y siguió animando desde el paso del primer corredor hasta el último, Gracias!!!

Esta sin lugar a dudas fué una gran carrera para mi, pero no redonda. En la salida tuve que esperar hasta que llegó mi turno que era el último junto con otros 6000 participantes y los inconvenientes que ello conlleva. Perdí mucho tiempo en adelantar y muchas energías zigzagueando buscando huecos. Nunca encontré una posición cómoda en carrera pero a pesar de todo estoy satisfecho con el resultado obtenido 1:35:02 finalmente fué mi tiempo que espero bajar al año que viene o en otra media maratón antes quizá.