Se acabó el sueño

La semana pasada se esfumó de golpe y porrazo el sueño de completar el maratón. El domingo tras la media de Bilbao me empezó a doler el talón del pié derecho, días después el dolor se extendió a toda la planta. Me temí lo peor, aún así el miércoles salí a correr una hora pero volví a casa cojeando con unos pinchazos terribles.
Tras unos días poniéndome hielo y Voltarén el dolor no remite y el sábado voy al hospital, a urgencias. Allí me confirmaron el peor de mis pensamientos, es una fascitis plantar. Se acabo todo, no me recuperaré a tiempo para cumplir mi objetivo y aunque llegase no estaría en condiciones de terminarla.
Llevo sin entrenar exactamente ocho días y el dolor es el mismo. Por las mañanas sobre todo me levanto como si tuviera clavadas unas puntas en el pié y con cada pisada se me clavan aún mas, es insoportable. Pasado el tiempo se calma, pero sigo estando fastidiado.
Una pena, después de tres meses entrenando el señor Maratón me ha ganado mucho antes de empezarlo. Pero ésto no es una derrota, es un "hasta luego" que le lanzo a éste señor y termino con: - Nos veremos las caras de nuevo.
No me apetece escribir mas por ahora, un saludo a los que siguen el blog a diario aunque no hagáis ningún comentario sé que estáis ahí.

Hasta luego